Me gustaría arrancarte las orejas
Pero no puedo
Dejarías de oír
el grito de la tierra.
Me gustaría palpar
El sabor de tu sangre negra
Desconocer el humor de tu boca,
Nacer otra vez
Y aprender a darte la vuelta de vez en cuando.
Me gustaría que me lastimaras
No para matarte o quizás sí,
El amor tiene sus misterios,
Te he dejado jugar con tus cartas desnudas
De cara al sol.
Es una constancia.
Me gustaría dejarte ciega
Para que no veas el mar que amas,
Sería un favor infame.
Mátame
Mátame
Dios es más cruel que yo.